La Corona de Adviento

La corona de Adviento, realizada con ramas verdes, que simbolizan la vida eterna. El círculo representa el continuo amor de Dios, sin principio ni final, y también la inmortalidad del alma, es el primer anuncio de Navidad Cada una de las cuatro velas de colores de la corona de Adviento representa una semana antes de la Navidad. La primera que se enciende es la morada, que significa vigilancia, la siguiente es la verde, esperanza, la roja es alegría y por último la blanca simboliza presencia y cercanía, por eso se enciende en la víspera y en el día de Navidad. El blanco en la liturgia simboliza pureza y tiempo de júbilo, y es usado en los momentos principales del calendario litúrgico: Navidad y Pascua. La corona de adviento encierra varios simbolismos:

La forma circular: El círculo no tiene principio ni fin. Es señal del amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe de terminar.

Las ramas verdes: Verde es el color de esperanza y vida. Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas. El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.

Las cuatro velas: Nos hacen pensar en la obscuridad provocada por el pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas la corona. Así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo. Son cuatro velas las que se ponen en la corona y se prenden de una en una, durante los cuatro domingos de adviento al hacer la oración en familia.


Las manzanas rojas que adornan la corona: Representan los frutos del jardín del Edén con Adán y Eva que trajeron el pecado al mundo pero recibieron también la promesa del Salvador Universal.

El listón rojo: Representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios que nos envuelve.


La corona o guirnalda de Adviento es el primer anuncio de Navidad. El Adviento inicia el 3 de diciembre de 2017